El domingo 31 de octubre en el Corredor de Arte Álvaro Obregón, algunos jocosos tianguistas -algunos disfrzados para fiesta de Halloween- le pusieron peluca rosa y bikini a una réplica del San Sebastián de Felipe Valero.
A sus pies pusieron la figura de un niño muerto. Rolando Rodríguez me ilustra que esa escultura apareció en la película mexicana Kilómetro 31 (2006), que se promociona como la "más taquillera de 2007" que, desde luego, no he visto.
El lunes 1 tomé fotos del mural sobre "La historia del pulque", pintado en la calle de Regina, donde aprovechando que es un andador iniciaban a poner numerosas ofrendas, y del edificio donde creo vivió el pintor Saturnino Herrán, en la contra esquina del Oxxo, en Mesones y 5 de Febrero. Fui a conseguir unas taloneras (de gel no de carne tarifada) en un local de ésta la calle y me aproximé al Panteón Zócalo para ver las ofrendas monumentales. El tumulto, más un sol candente, impidieron que tomara algunas notas.
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