jueves, 2 de octubre de 2008

HACE CUARENTA AÑOS

En 1968 cursaba el tercer grado en la Secundaria Diurna número 17, Constitución de 1857, ubicada en Patriotismo y Viaducto, en la colonia Escandón, en Tacubaya. Mientras el profesor de gimnasia (¿el famoso Tigre Toño?, apodado así por su andar homo-felino) nos preparaba para la tabla gimnástica que presentaríamos antes de las Olimpiadas, fui con Cuauhtémoc y su hermano (ambos cerebritos que a la mejor provocación decían “es un najayote”), guiados con una amiga de ellos, a la facultad de Economía o de Filosofía y Letras de CU (llena de consignas y pintas) y estuvimos en dos o tres manifestaciones, entre ella la del 27 de agosto.

De vez en cuando mi padre me obsequiaba la revista Mad (1953-a la fecha)que aún no incluía sensacionales viñetas diminutas del hispano-mexicano Sergio Aragonés (aún era colaborador apolítico de Mañana) pero sí la bizarra sección "Spy vs. Spy", del cubano-norteamericano Antonio Prohias. Yo adquiría ocasionalmente Hermelinda linda (1967-1985) y Burrerías (1967-197?), ambas creaciones del hispano-mexicano José Cabezas. Por esos días circulaba Placa chica, de Leonardo Vadillo. Siempre compré Los supermachos (1963-1967) y después Los agachados (1968-1977), ambas publicaciones del Eduardo del Río, mejor conocido como Rius.
El 24 de septiembre el tal Rius finalizó el “número especial de los cocolazos”, con la “valiosa colaboración” de AB (el caricaturista veracruzano Emilio Abdalá Pérez). Sin embargo ese especial circuló hasta el 2 de noviembre. Más oportuna fue la sangrienta Alarma!, que en su edición del 16 de octubre consignó abiertamente “La noche de horror en Tlatelolco!” Si no fue partidaria del movimiento estudiantil tampoco fue gobiernista como todos los diarios, entre ellos Excélsior.

A decir de Agustín Sánchez González los caricaturistas que simpatizaron con el movimiento estudiantil fueron Abel Quezada (varias veces censurado en Excélsior), Alberto Beltrán (con su impresionante mujer apuñalada afuera de la Plaza de las Tres culturas, con muertos incluidos en su célebre cartón dominical del diario El Día), Luis Borja, Francisco Ochoa y Juan Ramírez (en La Prensa), el portadista Jorge Carreño y Leonardo Vadillo (en el semanario Siempre!), Magú y Flit (en la revista Sucesos para todos), Rogelio Naranjo, Vadillo, AB, Rius y Helioflores (revistas Por qué? y La Garrapata).



Estuvieron en contra Marino (Excélsior), David Carrillo (El Universal), Rafael Freyre (El Sol de México), Alfredo Valdés (El Heraldo de México), el otro yo de Jorge Carreño (Novedades), Huici y Fa-Cha (en Jueves de Excélsior) y Cadena M. (revista Impacto).

Sergio Aragonés, del semanario
Mañana, se declaró apolítico.

No hay comentarios: