HOPELCHÉN



Acuarela y tinta / papel

Este municipio se encuentra a 80 kilómetros al oriente de la ciudad y puerto de Campeche, sobre la antigua carretera a Mérida. Tiene un interesante templo y ex convento del siglo XVI, así como un reloj monumental que fue inaugurado el 5 de mayo de 1911.

Al ver mi dibujo acuareleado, el doctor Colón me comentó que a la izquierda me había faltado el reloj centenario. Mario Canul recordó la anécdota de una persona que mandó a realizar una pintura. Como no le satisfacía cambió las versiones del pintor. Hasta que éste -desesperado- le preguntó su oficio y respondió que era zapatero. El pintor le dijo: "Zapatero...a tus zapatos".

Por las calles y en el jardín central de Hopelchén, se ven pocas mestizas y muchos menonitas que llegaron a estas calurosas tierras hacia los ochenta. Arriban en camionetas particulares y privadas, para abastecerse de víveres o para desayunar o comer. Van en familias o en grupos.

Hopelchén es el Macondo de Campeche. Hay un complicado entramado familiar en el cual predomina el apellido Lara. De estas tierras es el extravagante poeta Rubén Solís Lara, el asesinado líder estudiantil Efraín Calderón Lara (1947-1972), apodado "Charras"; el poeta, político socialista y periodista Humberto Lara y 

La obra sobre el primo

Doctor Emilio Lara, alias Doctor Colón

Lara (1906-1981, cuyo nombre honra la biblioteca municipal), el escritor y filántropo Hernán Lara Zavala (a quien conocí en 1981) y el doctor Emilio Lara, quien preside desde cuatro años las tertulias nocturnas en una de las mesas exteriores de La Lonchería La Olla 2, al lado del ocurrente y restaurantero Mario Canul Acosta, apodado Mario El Bruto o Mario Corona.

Mario Canul y el sablista oficial de Hopelchén